Lisianthus, flor del mes de julio
El lisianthus, cuyo nombre científico es Eustoma grandiflorum y perteneciente a la familia de las Gentianaceae, es la flor del mes de julio de la agenda floral.
Es una planta originaria de América del Norte, donde crece de forma silvestre, aunque también se encuentra en ciertas zonas de América Central.
Su bella floración en verano es un largo proceso que puede durar varias semanas, ya que sus capullos se abren de forma escalonada, no todos a la vez, cambiando su colorido.
Se caracteriza por flores de grandes pétalos de aspecto aterciopelado y de color blanco, azul, rosa o morado, que guardan un gran parecido con la peonía y la rosa, por lo que a esta flor se la conoce popularmente como rosa japonesa.
También, por sus hojas de tono verde azulado intenso y sus tallos de 40 a 60 centímetros con muchos capullos.
Una de sus curiosidades es que el lisianthus es capaz de seguir creciendo una vez cortado. Además, posee propiedades medicinales.
Su uso más extendido es en ramos de novia y decoración de bodas gracias a su simbología, puesto que se asocia con el amor, pero no es su único significado dependiendo del color. Por ejemplo, el rosa representa sensibilidad, el amarillo simboliza creatividad, el blanco significa dulzura y el malva, todo lo extravagante.
Esta planta es delicada en cuanto a las temperaturas. Necesita un lugar luminoso, fresco y de semisombra, sin tener contacto directo con el sol, protección frente al frío y las heladas, y riego regular, tres o cuatro veces a la semana en esta época del año, pero sin exceso de humedad.
Para el cuidado de la flor cortada y prolongar su duración, se recomienda rellenar un jarrón con agua a temperatura ambiente, cortar los tallos en diagonal para evitar que se doblen por el peso y quitar las hojas para que no toquen el agua.